El tenaz Rommel Pacheco se retira de los clavados sin medalla olímpica

Era todo o nada para Rommel Pacheco. Exprimía cada momento en la Villa Olímpica para llevarse recuerdos de sus últimos Juegos Olímpicos. En Tokio cumplía su cuarto ciclo olímpico y quería su medalla. Las cosas le iban bien al superar las fases previas para alcanzar la final en el trampolín. Un error en un giro, un fallo cuando menos debía ocurrir se presentó en la presentación del mexicano en el penúltimo salto. Pacheco, entre lágrimas, terminó en el sexto lugar. Los aplausos de sus colegas fueron un consuelo insuficiente para la perseverancia del veterano clavadista.

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