Con nocturnidad y alevosía, el presidente de Túnez, Kais Said, decretó anoche la prolongación por un periodo indefinido de las medidas excepcionales que aprobó el pasado 25 de julio, y que incluyen la congelación del Parlamento y la asunción por su parte de plenos poderes ejecutivos. El anuncio se hizo a través de una breve nota en la página de Facebook de la presidencia en la que se limitaba a informar que el presidente se dirigiría a la nación “en los próximos días”. La decisión llega un mes después de que el presidente Said destituyera al entonces primer ministro Hichem Mechichi, suspendiera la actividad del Parlamento y desatase con ello una grave crisis constitucional.