Amber Heard dijo el jueves que nunca quiso que el mundo conociera los detalles de los años de supuesto abuso que sufrió a manos de Johnny Depp, al terminar de presentar su evidencia en el caso de difamación de su exesposo contra un tabloide británico.
En el banquillo de los testigos por cuarto día consecutivo, Heard insistió en que todo lo que había dicho en el Tribunal Supremo en Londres era verdad.
Dijo que sólo quería que la “dejaran en paz” tras la ruptura de su tempestuoso matrimonio y “evitarle la vergüenza” a Depp.
“Yo no quería hacer esto, no quería exponer esta totalidad de lo que realmente me ocurrió”, dijo Heard. “No quería hablar de todo lo que sucedió en nuestro matrimonio y en nuestra relación”.
También dio a entender que revelar los detalles de su relación con Depp para que fueran diseccionados en un juicio público ha perjudicado y continuará perjudicando su carrera.
“¿Qué mujer se ha beneficiado de ser víctima de violencia doméstica?”, señaló.
Heard rindió declaración en la corte porque Depp, de 57 años, demandó a la editora de The Sun News Group Newspapers, y al editor ejecutivo del diario, Dan Wootton, por un artículo de abril de 2018 en el que lo tildaron de “marido golpeador”.
La defensa de The Sun se basa en las denuncias de Heard de 14 incidentes de violencia por parte de Depp entre 2013 y 2016, en lugares que incluyen su isla privada en las Bahamas, una casa alquilada en Australia y un avión privado.
En su declaración del jueves, la actriz y modelo reiteró que Depp muchas veces caía en una “borrachera” que podía durar días y que abusaba de ella cuando estaba ebrio y drogado.
“Johnny, cuando está limpio y sobrio, puede ser una persona maravillosa, generosa, amorosa”, dijo. “Es un hombre extraordinario cuando está así y yo lo amaba. El otro lado de él era un monstruo, pero yo siempre mantuve la esperanza de que volvería a estar limpio y sobrio”.
En sus primeros tres días de declaraciones, Heard, de 34 años, acusó a Depp de una variedad de actos de violencia, incluyendo lanzarle botellas “como granadas”, darle cabezazos y apagarse un cigarrillo en su propia mejilla. Alegó que a menudo temió por su vida durante su volátil relación.
Sasha Wass, la abogada que representa a News Group Newspapers, leyó una serie de mensajes de texto que Heard le había enviado a su madre, incluido uno de marzo de 2013 que decía: “Está loco, mami. Violento y loco. Estoy destrozada porque este es el hombre al que amo”.
Depp niega haber abusado de Heard y alega que ella era la agresora de la relación. Se perdió su testimonio del jueves porque llegó tarde a la corte.
La hermana de Heard, Whitney Henriquez, quien vivió en uno de los cinco penthouses de Depp en Los Ángeles, comenzó a presentar su evidencia.
Durante las primeras dos semanas de testimonios, el juez del Tribunal Supremo Andrew Nicol escuchó a Depp y a varios empleados actuales y pasados que han apoyado su versión sobre los hechos. Depp dijo que fue él quien sufrió abusos a manos de Heard y que ella tenía un historial de violencia hacia él.
En una declaración escrita que se hizo pública en la corte, Heard dijo que en varias ocasiones durante su relación soportó “puñetazos, bofetadas, patadas, cabezazos y estrangulamiento”. Dijo que “algunos incidentes fueron tan severos que temí que fuera a matarme, ya fuera intencionalmente o simplemente perdiendo el control y yendo demasiado lejos”. Dijo que Depp culpaba de sus acciones “a una tercera persona de creación propia” a la que se refería como “el monstruo”.
Depp y Heard se conocieron en el plató de la comedia de 2011 “The Rum Diary” (“Diario de un seductor”) y se casaron en Los Ángeles en febrero de 2015. Heard pidió el divorcio al año siguiente y éste quedó finalizado en 2017.
El caso debe terminar la próxima semana con la presentación de los alegatos finales de ambas partes el lunes y martes.